Éxodo 22

Leyes para reparar daños

1 »En caso de que alguien robe un buey o una oveja, y lo mate o lo venda, tendrá que pagar cinco reses por el buey y cuatro ovejas por la oveja.

2 »Si un ladrón es sorprendido en el momento del robo, y se le hiere y muere, su muerte no se considerará un asesinato.

3 Pero si ya es de día, su muerte sí se considerará un asesinato.

»El que robe tendrá que pagar el precio de lo que haya robado, pero si no tiene dinero, él mismo será vendido para pagar lo robado.

4 »Si se le encuentra el animal robado en su poder y con vida, tendrá que pagar el doble, ya sea un buey, un asno, o una oveja.

5 »Si alguien suelta a sus animales para que pasten en un campo o viñedo, y sus animales pastan en el campo de otro, tendrá que pagar el daño con lo mejor de su propio campo o de su propio viñedo.

6 »Si alguien hace fuego, y el fuego se extiende a las zarzas y quema el trigo amontonado, o el que está por cosecharse, o toda la siembra, esa persona tendrá que pagar los daños causados por el fuego.

7 »Si alguien le confía a otra persona dinero o cosas de valor, y a esa persona se los roban de su propia casa, el ladrón tendrá que pagar el doble, si es que lo encuentran;

8 pero si no lo encuentran, entonces el dueño de la casa será llevado ante Dios para ver si no ha echado mano de lo que el otro le confió.

9 »Si alguien se apropia de un buey, un asno o una oveja, o de algún vestido o cualquier otra cosa que se haya perdido y que alguno reclame como suyos, el caso de esas dos personas se llevará ante Dios, y el que resulte culpable pagará el doble al otro.

10 »Si alguien le confía a otra persona un asno, un buey o una oveja, o cualquier otro animal, y ese animal muere, o es lastimado, o es robado sin que nadie lo vea,

11 esa persona hará un juramento al dueño, en el nombre del Señor, de que no echó mano de lo que el otro le confió. El dueño aceptará su palabra, y el otro no pagará nada.

12 Pero si le robaron el animal ante sus propios ojos, tendrá que pagárselo al dueño.

13 Si el animal fue despedazado por un animal salvaje, para no pagar nada se deberán presentar como prueba los restos del animal muerto.

14 »Si alguien pide a otro que le preste un animal, y el animal muere o resulta lastimado sin estar presente el dueño, el que lo pidió prestado tendrá que pagar el daño;

15 pero si el dueño está presente, no tendrá que pagar nada. Si el animal había sido alquilado, el costo del alquiler será el único pago.

Leyes morales y religiosas

16 »En caso de que alguien seduzca a una mujer virgen que no esté comprometida, y la deshonre, tendrá que pagar la compensación acostumbrada y casarse con ella.

17 Aun si el padre de la joven no quiere dársela como esposa, tendrá que pagar la dote que se acostumbra dar por una mujer virgen.

18 »No dejes con vida a ninguna hechicera.

19 »El que se entregue a actos sexuales con un animal, será condenado a muerte.

20 »El que ofrezca sacrificios a otros dioses, en vez de ofrecérselos solamente al Señor, será condenado a muerte.

21 »No maltrates ni oprimas al extranjero, porque ustedes también fueron extranjeros en Egipto.

22 »No maltrates a las viudas ni a los huérfanos,

23 porque si los maltratas y ellos me piden ayuda, yo iré en su ayuda,

24 y con gran furia, a golpe de espada, les quitaré a ustedes la vida. Entonces quienes se quedarán viudas y huérfanos serán las mujeres y los hijos de ustedes.

25 »Si le prestas dinero a alguna persona pobre de mi pueblo que viva contigo, no te portes con ella como un prestamista, ni le cobres intereses.

26 Si esa persona te da su ropa como garantía del préstamo, devuélvesela al ponerse el sol,

27 porque esa ropa es lo único que tiene para protegerse del frío. Si no, ¿sobre qué va a acostarse? Y si él me pide ayuda, en su ayuda iré, porque yo sé tener compasión.

28 »Nunca ofendas a Dios, ni maldigas al que gobierna a tu pueblo.

29 »No tardes en traerme ofrendas de todas tus cosechas y de todo tu vino.

»Tu primer hijo me lo darás,

30 lo mismo que la primera cría de tus vacas y de tus ovejas. Pueden quedarse siete días con su madre, pero a los ocho días de nacidos me los darás.

31 »Ustedes deben ser hombres consagrados a mí.

»No coman la carne de animales despedazados por las fieras en el campo; échensela a los perros.

Éxodo 23

Leyes para hacer justicia

1 »No des informes falsos, ni te hagas cómplice del malvado para ser testigo en favor de una injusticia.

2 »No sigas a la mayoría en su maldad.

»Cuando hagas declaraciones en un caso legal, no te dejes llevar por la mayoría, inclinándote por lo que no es justo;

3 pero tampoco favorezcas indebidamente las demandas del pobre.

4 »Si encuentras el buey o el asno que tu enemigo había perdido, devuélveselo.

5 No dejes de ayudar a aquel que te odia; si ves que su asno cae bajo el peso de la carga, ayúdale a quitar la carga de encima.

6 »No le desconozcas al pobre sus derechos en un asunto legal.

7 »Apártate de las acusaciones falsas y no condenes a muerte al hombre inocente y sin culpa, porque yo no declararé inocente al culpable.

8 »No aceptes soborno, porque el soborno vuelve ciegos a los hombres y hace que los inocentes pierdan el caso.

9 »No oprimas al extranjero, pues ustedes fueron extranjeros en Egipto y ya saben lo que es vivir en otro país.

Descanso obligatorio

10 »Cultiva la tierra y recoge las cosechas durante seis años,

11 pero el séptimo año no la cultives: déjala descansar para que la gente pobre de tu país coma de ella, y para que los animales salvajes se coman lo que sobre. Haz lo mismo con tus viñedos y tus olivos.

12 »Haz durante seis días todo lo que tengas que hacer, pero descansa el día séptimo, para que descansen también tu buey y tu asno, y recobren sus fuerzas tu esclavo y el extranjero.

13 »Cumplan con todo lo que les he dicho, y que jamás se escuche en labios de ustedes el nombre de otros dioses.

Las tres grandes fiestas

14 »Haz fiesta en mi honor tres veces al año.

15 Celebra la fiesta del pan sin levadura y, de acuerdo con lo que te he ordenado, come en ella pan sin levadura durante siete días. La fecha señalada es el mes de Abib, porque en ese mes saliste de Egipto. Y nadie podrá venir a verme, si no trae algo.

16 »Celebra también la fiesta de la cosecha, de los primeros frutos de lo que sembraste en el campo, lo mismo que la fiesta de la cosecha de fin de año, cuando coseches todo lo que hayas sembrado.

17 »Todos los hombres deben presentarse ante el Señor tres veces al año.

18 »Cuando me hagas sacrificios de animales, no ofrezcas juntos su sangre y el pan con levadura, ni guardes su grasa para el día siguiente.

19 »Los mejores primeros frutos de tu tierra debes llevarlos al templo del Señor tu Dios.

»No cocines cabritos en la leche de su madre.

El ángel del Señor

20 »Mira, yo enviaré mi ángel delante de ti, para que te cuide en el camino y te lleve al lugar que te he preparado.

21 No te alejes de él; obedécelo y no le seas rebelde, porque él actúa en mi nombre y no perdonará los pecados de ustedes.

22 Pero si de veras le obedeces y haces todo lo que yo he ordenado, seré enemigo de tus enemigos y me opondré a quienes se te opongan.

23 Mi ángel irá delante de ti, y te llevará al país de los amorreos, hititas, ferezeos, cananeos, heveos y jebuseos, a quienes yo arrancaré de raíz.

24 No sigas el mal ejemplo de esos pueblos. No te arrodilles ante sus dioses, ni los adores; al contrario, destruye por completo sus ídolos y piedras sagradas.

25 Adora al Señor tu Dios, y él bendecirá tu pan y tu agua.

»Yo alejaré de ti la enfermedad,

26 y haré que no mueras antes de tiempo. No habrá en tu país ninguna mujer que aborte o que sea estéril.

27 »Yo haré que se extiendan el miedo y los gritos de angustia delante de ti, en cualquier nación por donde pases, y haré que tus enemigos huyan ante ti.

28 Haré que el pánico se extienda a tu paso, y así huirán de tu presencia los heveos, los hititas y los cananeos.

29 No los arrojaré de tu presencia en un año, para que la tierra no se eche a perder ni aumenten los animales salvajes y te hagan daño.

30 Los arrojaré de tu presencia poco a poco, hasta que tengas muchos hijos y tomes posesión de la tierra.

31 Tus fronteras las he marcado así: desde el Mar Rojo hasta el mar de los filisteos, y desde el desierto hasta el río Éufrates. Yo he puesto en tus manos a los habitantes de ese país, y tú los arrojarás de tu presencia.

32 »No entres en tratos con ellos ni con sus dioses,

33 ni los dejes quedarse en tu país, para que no te hagan pecar contra mí. Pues llegarías a adorar a sus dioses, y eso sería tu perdición.»

Éxodo 24

Confirmación de la alianza

1 El Señor le dijo a Moisés:

—Sube con Aarón, Nadab y Abihú, y con setenta de los ancianos de Israel, al lugar donde yo estoy; pero quédense a cierta distancia, y arrodíllense allí.

2 Sólo tú podrás acercarte a mí; los demás no deberán acercarse, ni la gente subirá contigo.

3 Moisés fue y le contó al pueblo todo lo que el Señor había dicho y ordenado, y todos a una voz contestaron:

—¡Haremos todo lo que el Señor ha ordenado!

4 Entonces Moisés escribió todo lo que el Señor había dicho, y al día siguiente, muy temprano, se levantó y construyó un altar al pie del monte, y colocó doce piedras sagradas, una por cada tribu de Israel.

5 Luego mandó a unos jóvenes israelitas que mataran toros y los ofrecieran al Señor como holocaustos y sacrificios de reconciliación.

6 Moisés tomó la mitad de la sangre y la echó en unos tazones, y la otra mitad la roció sobre el altar.

7 Después tomó el libro de la alianza y se lo leyó al pueblo, y ellos dijeron:

—Pondremos toda nuestra atención en hacer lo que el Señor ha ordenado.

8 Entonces Moisés tomó la sangre y, rociándola sobre la gente, dijo:

—Ésta es la sangre que confirma la alianza que el Señor ha hecho con ustedes, sobre la base de todas estas palabras.

9 Moisés subió al monte con Aarón, Nadab, Abihú y setenta ancianos de Israel.

10 Allí vieron al Dios de Israel: bajo sus pies había algo brillante como un piso de zafiro y claro como el mismo cielo.

11 Dios no les hizo daño a estos hombres notables de Israel, los cuales vieron a Dios, y comieron y bebieron.

Moisés en el monte Sinaí

12 El Señor le dijo a Moisés:

—Sube al monte, donde yo estoy, y espérame allí, pues voy a darte unas tablas de piedra en las que he escrito la ley y los mandamientos para instruir a los israelitas.

13 Moisés se levantó y subió al monte de Dios, junto con su ayudante Josué.

14 A los ancianos les dijo:

—Espérennos en este lugar, hasta que regresemos. Aquí se quedan Aarón y Hur con ustedes, y si alguien tiene algún problema, que se lo presente a ellos.

15 Dicho esto, Moisés subió al monte, el cual quedó cubierto por una nube.

16 La gloria del Señor vino a posarse sobre el monte Sinaí, y durante seis días la nube lo cubrió. Al séptimo día el Señor llamó a Moisés desde la nube.

17 La gloria del Señor se presentó a los ojos de los israelitas como un fuego devorador, sobre la parte más alta del monte.

18 Moisés entró en la nube, subió al monte, y allí se quedó cuarenta días y cuarenta noches.

Éxodo 25

Ofrendas para el santuario

1 El Señor se dirigió a Moisés y le dijo:

2 «Di a los israelitas que recojan una ofrenda para mí. Deben recogerla entre todos los que quieran darla voluntariamente y de corazón;

3 y lo que deben recoger es lo siguiente: oro, plata, cobre,

4 tela morada, tela de púrpura, tela roja, lino fino, pelo de cabra,

5 pieles de carnero teñidas de rojo, pieles finas, madera de acacia,

6 aceite para lámparas, perfumes para el aceite de consagrar y para el incienso aromático,

7 y piedras de cornalina y otras piedras finas para montarlas en el efod y el pectoral del sumo sacerdote.

8 Y háganme un santuario para que yo habite entre ellos.

9 Pero ese lugar donde yo he de habitar, y todos sus muebles, tienes que hacerlos exactamente iguales a los que te voy a mostrar.

El arca de la alianza

10 »Haz un arca de madera de acacia, que mida un metro y diez centímetros de largo, sesenta y cinco centímetros de ancho, y sesenta y cinco centímetros de alto.

11 Recúbrela de oro puro por dentro y por fuera, y ponle un ribete de oro alrededor.

12 Hazle también cuatro argollas de oro, y pónselas en las cuatro patas, dos de un lado y dos del otro.

13 Haz también travesaños de madera de acacia, recúbrelos de oro,

14 y pásalos a través de las argollas que están a los costados del arca, para que pueda ser levantada con ellos,

15 y ya no vuelvas a quitarlos; déjalos ahí, en las argollas del arca,

16 y coloca en el arca la ley que te voy a dar.

17 »Haz una tapa de oro puro, que mida un metro y diez centímetros de largo por sesenta y cinco centímetros de ancho,

18 con dos seres alados de oro labrado a martillo en los dos extremos.

19 La tapa y los seres alados deben ser de una sola pieza; uno de ellos estará en un extremo de la tapa y el otro en el otro extremo,

20 el uno frente al otro, pero con la cara hacia la tapa, y sus alas deben quedar extendidas por encima de la tapa cubriéndola con ellas.

21 Coloca después la tapa sobre el arca, y pon dentro del arca la ley que te voy a dar.

22 Allí me encontraré contigo y, desde lo alto de la tapa, de entre los dos seres alados que están sobre el arca de la alianza, te haré saber todas mis órdenes para los israelitas.

La mesa para el pan de la presencia

23 »Haz una mesa de madera de acacia, que mida noventa centímetros de largo, cuarenta y cinco centímetros de ancho, y sesenta y cinco centímetros de alto.

24 Recúbrela de oro puro, y ponle un ribete de oro alrededor.

25 Hazla con un entrepaño de siete centímetros de ancho, y ponle al entrepaño un ribete de oro;

26 haz también cuatro argollas de oro, y pónselas en las cuatro esquinas que corresponden a las cuatro patas,

27 de tal manera que queden junto al entrepaño, para que se pasen los travesaños por ellos y se pueda llevar la mesa.

28 Haz de madera de acacia los travesaños con los que se ha de llevar la mesa, y recúbrelos de oro,

29 y haz de oro puro sus platos, cucharones, jarras y copas para las ofrendas de líquidos.

30 Pon siempre en la mesa, en presencia mía, el pan que se me consagra.

El candelabro de oro

31 »Haz también un candelabro de oro puro labrado a martillo. Su base, tronco, copas, cálices y pétalos formarán una sola pieza,

32 y de los costados le saldrán seis brazos, tres de un lado y tres del otro.

33 Cada uno de los seis brazos que salen del tronco del candelabro deberá tener tres copas en forma de flor de almendro, con su cáliz y sus pétalos,

34 y el tronco mismo tendrá cuatro copas, también en forma de flor de almendro, con su cáliz y sus pétalos.

35 Cada uno de los tres pares de brazos que salen del candelabro tendrá un cáliz en su parte inferior.

36 Los cálices y los brazos deberán formar una sola pieza con el candelabro, el cual ha de ser de oro puro labrado a martillo.

37 Hazle también siete lámparas, y colócalas de tal modo que alumbren hacia el frente,

38 y que sus tenazas y platillos sean también de oro puro.

39 Usa treinta y tres kilos de oro puro para hacer el candelabro y todos sus utensilios,

40 y pon tu atención en hacerlos iguales a los modelos que se te mostraron en el monte.

Éxodo 26

El santuario

1 »Haz el santuario con diez cortinas de lino torcido, tela morada, tela de púrpura y tela roja; borda en ellas artísticamente dos seres alados.

2 Todas estas cortinas deben tener la misma medida: doce metros y medio de largo por dos de ancho.

3 Cose cinco cortinas juntas, una sobre la otra, lo mismo que las otras cinco,

4 y pon unos ojales de cordón morado en el borde de la primera cortina de un grupo, y también en el borde de la última cortina del otro grupo.

5 Tanto a la cortina del primer grupo como a la del segundo, debes hacerles cincuenta ojales, de manera que queden uno frente al otro.

6 Haz también cincuenta ganchos de oro para enganchar un grupo de cortinas al otro, de modo que el santuario forme un todo.

7 »Haz también once cortinas de pelo de cabra para formar una tienda de campaña que cubra el santuario.

8 Todas estas cortinas deben tener la misma medida: trece metros y medio de largo por dos de ancho.

9 Cose cinco cortinas juntas por una parte, y seis por otra, y dobla la sexta cortina por la parte delantera de la tienda de campaña.

10 Haz luego cincuenta ojales en el borde de la cortina que cierra el primer grupo, y otros cincuenta ojales en el borde de la cortina del segundo grupo.

11 Haz también cincuenta ganchos de bronce y engánchalos en los ojales, de modo que la tienda de campaña forme un todo.

12 Y como las cortinas de la tienda son más largas, la mitad de la parte sobrante quedará colgando a espaldas del santuario.

13 Así el santuario quedará cubierto por el largo sobrante, que colgará de los dos lados: cuarenta y cinco centímetros de un lado y cuarenta y cinco centímetros del otro.

14 »Haz para la tienda de campaña una cubierta de pieles de carnero teñidas de rojo, y una cubierta de pieles finas para la parte superior.

15 »Haz unas tablas de madera de acacia, para el santuario, y ponlas bien derechas.

16 Cada tabla debe medir cuatro metros y medio de largo por sesenta y cinco centímetros de ancho,

17 y tener dos espigas para que cada tabla quede ensamblada con la otra. Haz así todas las tablas para el santuario.

18 Cuando las hagas, haz veinte tablas para el lado sur,

19 y pon cuarenta bases de plata debajo de ellas. Cada tabla debe tener dos bases debajo, para sus dos espigas.

20 »También para el otro lado del santuario, o sea el lado norte, harás veinte tablas

21 con sus cuarenta bases de plata, para que debajo de cada tabla haya dos bases.

22 Para la parte posterior del santuario, o sea el lado oeste, haz seis tablas,

23 y dos tablas más para las esquinas de la parte posterior.

24 Estas tablas deben formar pareja y quedar unidas por la parte de arriba hasta el primer anillo. Así ha de hacerse con las dos tablas para las dos esquinas.

25 Habrá entonces ocho tablas con sus correspondientes dieciséis bases de plata, o sea dos bases debajo de cada tabla.

26 »Haz cinco travesaños de madera de acacia para las tablas de un lado del santuario,

27 cinco travesaños para las tablas del otro lado y otros cinco travesaños para las tablas de la parte trasera, la que da al oeste.

28 El travesaño central tiene que pasar de un lado a otro, a la mitad de las tablas.

29 Después recubre de oro las tablas, y hazles argollas de oro para que los travesaños, ya recubiertos de oro, pasen a través de ellas.

30 En fin, construye el santuario exactamente igual al modelo que se te mostró en el monte.

31 »Haz un velo de tela morada, tela de púrpura, tela roja y lino torcido, y borda artísticamente dos seres alados en él.

32 Y luego, con unos ganchos de oro, cuélgalo de cuatro postes de madera de acacia, que deben estar recubiertos de oro, y sobre cuatro bases de plata.

33 Cuelga entonces el velo debajo de los ganchos, y allí, tras el velo, pon el arca de la alianza. Así la cortina les servirá a ustedes de división entre el Lugar santo y el Lugar santísimo.

34 Coloca después la tapa sobre el arca de la alianza, en el Lugar santísimo.

35 Pon la mesa fuera del velo, en el lado norte del santuario, y el candelabro en el lado sur, frente a la mesa.

36 »Haz para la entrada de la tienda de campaña una cortina de tela morada, tela de púrpura, tela roja y lino torcido, bordada artísticamente.

37 Haz también, para la cortina, cinco postes de madera de acacia recubiertos de oro, con sus ganchos de oro, y funde cinco bases de bronce para los postes.

Éxodo 27

El altar de bronce

1 »Haz un altar cuadrado, de madera de acacia, que mida dos metros y veinticinco centímetros por cada lado, y un metro y veinticinco centímetros de alto.

2 Hazle cuatro cuernos para sus cuatro esquinas, los cuales deben formar una sola pieza con el altar, y recubre de bronce el altar.

3 Todos los utensilios del altar han de ser de bronce: los ceniceros, las palas, los tazones, los tenedores y los braseros.

4 Hazle también una rejilla de bronce, y pon cuatro argollas de bronce en las cuatro esquinas de la rejilla.

5 Coloca después la rejilla debajo del borde del altar, para que quede a media altura del altar.

6 Haz también para el altar unos travesaños de madera de acacia, y recúbrelos de bronce.

7 Los travesaños deben pasar a través de las argollas y quedarse en los dos costados del altar, para que se pueda transportar.

8 El altar ha de ser hueco y de madera, igual al que viste en el monte.

El patio del santuario

9 »Haz un patio para el santuario. Por el lado sur, el patio debe tener cortinas de lino torcido, extendidas a lo largo de cuarenta y cinco metros.

10 Sus veinte postes y sus veinte bases serán de bronce, y sus ganchos y anillos serán de plata.

11 Asimismo, por el lado norte, deberá haber cortinas a lo largo de cuarenta y cinco metros, con sus veinte postes y veinte bases de bronce, y sus ganchos y anillos de plata.

12 Por el lado occidental habrá veintidós metros y medio de cortinas, extendidas a lo ancho del patio, con diez postes y diez bases.

13 Por el lado oriental, a lo ancho del patio, habrá también veintidós metros y medio de cortinas.

14 De un lado de la entrada habrá unos siete metros de cortinas, con tres postes y tres bases;

15 y del otro lado, también unos siete metros de cortinas, con tres postes y tres bases.

16 En la entrada misma del patio deberá haber nueve metros de cortinas de tela morada, tela de púrpura, tela roja y lino torcido, bordadas artísticamente, con cuatro postes y cuatro bases.

17 Todos los postes alrededor del patio deberán tener anillos de plata, ganchos de plata y bases de bronce.

18 El patio medirá cuarenta y cinco metros de largo, veintidós metros y medio de ancho por los dos lados, y dos metros y veinticinco centímetros de alto. Las cortinas serán de lino torcido, y las bases de bronce.

19 Todas las cosas necesarias para el culto en el santuario serán de bronce, lo mismo que todas sus estacas y las estacas del patio.

El aceite para las lámparas

20 »Ordena a los israelitas que te traigan aceite puro de oliva, para mantener las lámparas siempre encendidas.

21 Aarón y sus hijos se encargarán de arreglar las lámparas, para que ardan delante del Señor toda la noche en la tienda del encuentro con Dios, fuera del velo que está junto al arca de la alianza. Ésta es una ley permanente para los israelitas y sus descendientes.

Éxodo 28

Las ropas de los sacerdotes

1 »De entre los israelitas, mantén cerca de ti a tu hermano Aarón y a sus hijos Nadab, Abihú, Eleazar e Itamar, para que sean mis sacerdotes.

2 Haz para tu hermano Aarón ropas especiales, que le den esplendor y belleza.

3 Habla tú con todos los que tengan mayores aptitudes, con aquellos a quienes he llenado de cualidades artísticas, para que hagan las ropas de Aarón y así él sea consagrado como mi sacerdote.

4 Las ropas que han de hacer son estas: el pectoral, el efod, la capa, la túnica bordada, el turbante de lino y el cinturón. Así que harán ropas especiales para tu hermano Aarón y para sus hijos, para que oficien como sacerdotes míos.

5 Los que hagan las ropas deberán usar oro, tela morada, tela de púrpura, tela roja y lino torcido.

6 »El efod ha de ser de oro, tela morada, tela de púrpura, tela roja y lino torcido, bordado artísticamente

7 y con dos tirantes unidos a sus dos extremos.

8 El cinturón que va sobre el efod para sujetarlo, formará una sola pieza con él, y será también de oro, tela morada, tela de púrpura, tela roja y lino torcido.

9 »Toma luego dos piedras de cornalina, y graba en ellas los nombres de los hijos de Israel,

10 en el orden en que nacieron; seis nombres en una piedra y seis nombres en la otra.

11 El grabado de los nombres en las piedras lo hará un joyero, a la manera del grabado de un sello. Monta luego las dos piedras en monturas de oro,

12 y ponlas sobre los tirantes del efod, como piedras para recordar a los hijos de Israel. Así Aarón llevará sobre sus hombros los nombres de ellos ante el Señor, para recordarlos.

13 Las monturas hazlas de oro;

14 haz luego una cadena con dos cordones de oro puro, y ponla alrededor de las monturas.

15 »El pectoral, con los instrumentos del juicio, lo harás de la misma manera que el efod, es decir, bordado artísticamente. Hazlo de oro, tela morada, tela de púrpura, tela roja y lino torcido,

16 doble y cuadrado, de veintidós centímetros por cada lado.

17 Cúbrelo de piedras preciosas distribuidas en cuatro hileras. La primera hilera debe tener un rubí, un crisólito y una esmeralda;

18 la segunda, un granate, un zafiro y un jade;

19 la tercera, un jacinto, una ágata y una amatista;

20 y la cuarta, un topacio, una cornalina y un jaspe. Las piedras deben estar montadas en monturas de oro,

21 y tienen que ser doce, pues doce son los nombres de los hijos de Israel. En cada piedra se grabará, en forma de sello, el nombre de una de las doce tribus.

22 »Haz para el pectoral unas cadenas de oro puro, torcidas como cordones.

23 Haz también dos argollas de oro, y ponlas en los dos extremos del pectoral;

24 pon luego las dos cadenas de oro en las dos argollas que están en los dos extremos superiores del pectoral,

25 y pon las dos puntas de las dos cadenas sobre las dos monturas, asegurándolas sobre los tirantes del efod por su parte delantera.

26 Haz otras dos argollas de oro, y ponlas en los dos extremos inferiores del pectoral, sobre la orilla interior que queda junto al efod.

27 Haz dos argollas más de oro, y ponlas en la parte delantera de los tirantes del efod, pero por debajo, junto a las costuras y un poco arriba del cinturón del efod.

28 Entonces se unirán las argollas del pectoral a las argollas del efod con un cordón morado, para que el pectoral quede arriba del cinturón del efod y no se separe del mismo.

29 Y así, cuando Aarón entre en el santuario llevando puesto el pectoral con los instrumentos del juicio, llevará también sobre su pecho los nombres de los hijos de Israel ante la presencia del Señor, para que él los recuerde siempre.

30 Pon en el pectoral el Urim y el Tumim, que son los instrumentos del juicio, para que Aarón los lleve sobre su pecho cuando se presente ante el Señor. Así Aarón llevará siempre, sobre su pecho, los instrumentos del juicio ante el Señor.

31 »Haz de tela morada toda la capa del efod,

32 con una abertura en el centro para la cabeza. En la orilla de la abertura debe hacérsele un dobladillo, como el que tienen los chalecos de cuero, para que no se rompa.

33 Adorna el borde de la capa con granadas de tela morada, tela de púrpura y tela roja, combinadas con campanitas de oro alrededor de todo el borde;

34 es decir, que irá una campanita de oro y luego una granada, otra campanita de oro y otra granada, y así por todo el borde de la capa.

35 Aarón debe llevar puesta la capa cuando oficie como sacerdote, para que cuando entre en el santuario ante el Señor, o cuando salga, se oiga el sonido de las campanas y así él no muera.

36 »Haz una placa de oro puro, y graba en ella, como si fuera un sello, las palabras “Consagrado al Señor”.

37 Pon la placa en el turbante, por la parte delantera, atada con un cordón morado para que quede fija.

38 Así estará siempre sobre la frente de Aarón, y Aarón cargará con las faltas que cometan los israelitas en las cosas santas y cuando consagren sus ofrendas; pero la placa hará que el Señor acepte las ofrendas.

39 »Haz la túnica bordada y de lino, y haz también de lino el turbante. El cinturón ha de ser bordado artísticamente.

40 A los hijos de Aarón hazles túnicas, cinturones y turbantes que les den esplendor y belleza.

41 »Así deberás vestir a tu hermano Aarón y a sus hijos, y luego derramarás aceite sobre su cabeza para darles plena autoridad y consagrarlos como sacerdotes míos.

42 Hazles también calzoncillos de lino que les cubran de la cintura a los muslos,

43 y que Aarón y sus hijos los lleven puestos cuando entren en la tienda del encuentro, o cuando se acerquen al altar, mientras oficien como sacerdotes en el santuario, para que no cometan ninguna falta y mueran. Ésta es una ley permanente para él y sus descendientes.

Éxodo 29

Consagración de los sacerdotes

1 »Para consagrarlos como mis sacerdotes, esto es lo que debes hacer con ellos: toma un becerro y dos carneros que no tengan ningún defecto;

2 con la mejor harina de trigo, haz panes y tortas sin levadura, amasadas con aceite, y hojuelas sin levadura rociadas con aceite,

3 y ponlos en un canastillo para llevarlos al santuario, junto con el becerro y los dos carneros.

4 Luego lleva a Aarón y a sus hijos a la entrada de la tienda del encuentro, y haz que se bañen;

5 toma después las ropas sacerdotales, y viste a Aarón con la túnica y la capa del efod, y con el efod mismo y el pectoral. Ajústale el cinturón del efod;

6 ponle el turbante en la cabeza y, sobre el turbante, la placa que lo consagra como sacerdote.

7 Toma entonces el aceite de consagrar, y consagra a Aarón como sacerdote, derramando el aceite sobre su cabeza.

8 Haz también que se acerquen sus hijos, y vístelos con las túnicas.

9 Tanto a Aarón como a ellos les ajustarás el cinturón y les acomodarás el turbante. De esta manera les darás plena autoridad, y su sacerdocio será una ley permanente.

10 »Después lleva el becerro hasta la tienda del encuentro, para que Aarón y sus hijos pongan las manos sobre la cabeza del animal,

11 y allí, ante el Señor, a la entrada de la tienda del encuentro, mata al becerro.

12 Toma entonces con el dedo un poco de su sangre y úntala en los cuernos del altar, y derrama al pie del altar toda la sangre que quede.

13 A los intestinos, hígado y riñones, quítales la grasa de que están cubiertos, y quémalos en el altar;

14 pero la carne, la piel y el estiércol del becerro, quémalos en las afueras del campamento, pues es un sacrificio por el pecado.

15 »Toma uno de los dos carneros, y que Aarón y sus hijos le pongan las manos sobre la cabeza.

16 Después mátalo, y rocía con su sangre los costados del altar;

17 luego córtalo en pedazos, lava sus intestinos y sus patas, y ponlas junto con los pedazos y la cabeza.

18 Entonces ofrece el carnero sobre el altar como holocausto en honor del Señor, como ofrenda quemada de olor agradable.

19 »Toma entonces el otro carnero, y que Aarón y sus hijos le pongan las manos sobre la cabeza.

20 Mata el carnero, toma un poco de su sangre y pónsela a Aarón y a sus hijos en la parte inferior de la oreja derecha, en el pulgar de la mano derecha y en el dedo gordo del pie derecho. Luego rocía con el resto de la sangre del carnero los costados del altar.

21 Y de la sangre que quede sobre el altar, y del aceite para consagrar, toma un poco y rocíalos sobre Aarón y sobre su ropa, y sobre sus hijos y la ropa de ellos. Así quedarán consagrados Aarón y sus hijos, lo mismo que sus ropas.

22 »Después toma la grasa que el carnero tiene en la cola y sobre los intestinos y en el hígado, y toma también sus dos riñones y la grasa que los cubre, y su muslo derecho, porque es un carnero para la consagración de sacerdotes.

23 De los panes sin levadura que están en un canastillo ante el Señor, toma un pan redondo, un pan amasado con aceite y una hojuela;

24 pon todo esto en las manos de Aarón y de sus hijos, y celebra el rito de presentación ante el Señor.

25 Luego retira esto de sus manos y quémalo en el altar, junto con el holocausto de aroma agradable al Señor. Es una ofrenda quemada en honor del Señor.

26 »Para la consagración de Aarón, toma también el pecho del carnero y celebra el rito de presentación ante el Señor. A ti te tocará esa parte.

27 Aparta el pecho presentado como ofrenda especial en ese rito, y el muslo que se ofrece como contribución, pues son las partes que del carnero de la consagración se reservan para Aarón y sus hijos.

28 Eso será para Aarón y sus hijos. Es una ley permanente para los israelitas: esta ofrenda será una contribución hecha por los israelitas como sacrificio de reconciliación al Señor.

29 »La ropa sagrada de Aarón la heredarán sus descendientes cuando sean consagrados y reciban plena autoridad como sacerdotes.

30 Y el sacerdote descendiente de Aarón que ocupe su lugar y que entre en la tienda del encuentro para oficiar en el santuario, deberá llevar puesta esa ropa durante siete días.

31 »Toma después el carnero de la consagración, y cuece su carne en un lugar sagrado.

32 Aarón y sus descendientes comerán la carne del carnero y el pan del canastillo, a la entrada de la tienda del encuentro.

33 Los comerán porque fueron ofrecidos para obtener el perdón de sus pecados, cuando fueron consagrados y recibieron plena autoridad como sacerdotes. Pero ningún extraño deberá comer de estas cosas, porque son sagradas.

34 Y si para el día siguiente queda algo del pan y de la carne de la consagración, quema lo que haya quedado, y que nadie lo coma, porque es sagrado.

35 »Haz todo esto con Aarón y sus hijos, de acuerdo con todas mis instrucciones. Dedica siete días a investirlos de autoridad,

36 y ofrece cada día un becerro como sacrificio para obtener el perdón de los pecados; purifica el altar, ofreciendo sobre él un sacrificio por el pecado, y derrama aceite sobre él, para consagrarlo.

37 Durante siete días ofrecerás sobre el altar sacrificios por el pecado; así lo consagrarás a Dios, y será un altar santísimo: cualquier cosa que toque el altar quedará consagrada.

Las ofrendas diarias

38 »Diariamente y sin falta debes ofrecer sobre el altar dos corderos de un año.

39 Uno de ellos lo ofrecerás por la mañana, y el otro lo ofrecerás al atardecer.

40 Con el primer cordero ofrecerás unos dos kilos de la mejor harina, mezclada con un litro de aceite de oliva, y derramarás como ofrenda un litro de vino.

41 Lo mismo harás al atardecer con el otro cordero y con las ofrendas de harina y de vino, ofrendas quemadas de aroma agradable al Señor.

42 Estas ofrendas quemadas en mi honor son las que de padres a hijos se ofrecerán siempre en mi presencia, a la entrada de la tienda del encuentro, que es donde me encontraré contigo para hablarte.

43 Allí me encontraré con los israelitas, y el lugar quedará consagrado por mi presencia.

44 Consagraré la tienda del encuentro y el altar, y consagraré también a Aarón y a sus hijos como sacerdotes míos.

45 Yo viviré entre los israelitas, y seré su Dios.

46 Así sabrán que yo soy el Señor su Dios, el que los sacó de Egipto para vivir entre ellos. Yo soy el Señor su Dios.

Éxodo 30

El altar del incienso

1 »Haz también un altar de madera de acacia, para quemar incienso.

2 Tiene que ser cuadrado, de cuarenta y cinco centímetros de largo por cuarenta y cinco centímetros de ancho, y de noventa centímetros de altura, y los cuernos del altar deben formar una sola pieza con el altar mismo.

3 Recubre de oro puro su parte superior, sus cuatro lados y sus cuernos, y ponle un ribete de oro alrededor.

4 Ponle también unas argollas de oro debajo del ribete, dos en las esquinas de un lado y dos en las esquinas del otro, para pasar por ellas los travesaños con que va a ser transportado.

5 Haz los travesaños de madera de acacia, y recúbrelos de oro.

6 Pon luego el altar ante el velo que está junto al arca de la alianza, ante la tapa que lo cubre, donde yo me encontraré contigo.

7 Todas las mañanas, a la hora de preparar las lámparas, Aarón quemará incienso aromático sobre este altar,

8 y lo quemará también al atardecer, a la hora de encender las lámparas. Esto se hará en la presencia del Señor siempre, a través de los siglos.

9 No ofrezcas sobre este altar ningún otro incienso, ni holocaustos, ni ofrendas de cereales, ni tampoco ofrendas de vino derramado.

10 Este altar estará completamente consagrado al Señor, y una vez al año ofrecerá Aarón sobre los cuernos del altar la sangre del sacrificio para obtener el perdón de los pecados. Una vez al año, todos los años, sobre este altar se ofrecerá el sacrificio para obtener el perdón de los pecados.»

El rescate por la vida

11 El Señor se dirigió a Moisés y le dijo:

12 «Cuando hagas un censo de los israelitas, cada uno de ellos deberá dar una contribución al Señor como rescate por su vida, a fin de que no haya ninguna plaga mortal con motivo del censo.

13 Todo el que sea registrado dará como contribución al Señor cinco gramos de plata, que es la mitad del peso oficial del santuario.

14 Todos los registrados de veinte años para arriba darán esta contribución al Señor,

15 y al dar cada uno al Señor el rescate por su vida, ni el rico dará más de cinco gramos de plata, ni el pobre menos de cinco.

16 Así que recogerás la plata que los israelitas den como rescate por su vida, y la entregarás para el culto de la tienda del encuentro. Eso hará que el Señor se acuerde de los israelitas, y de que dieron el rescate por su vida.»

La palangana de bronce

17 El Señor se dirigió a Moisés y le dijo:

18 «Haz una palangana de bronce, con su base del mismo metal, que sirva para lavarse; ponla entre la tienda del encuentro y el altar, y llénala de agua.

19 Aarón y sus hijos sacarán agua de allí para lavarse las manos y los pies.

20 Y se los lavarán cuando entren en la tienda del encuentro, y cuando se acerquen al altar para oficiar y presentar al Señor la ofrenda quemada. Así no morirán.

21 Para que no mueran, deberán lavarse las manos y los pies. Ésta será una ley permanente a través de los siglos para Aarón y sus descendientes.»

El aceite de consagrar

22 El Señor se dirigió a Moisés y le dijo:

23 «Escoge tú mismo las mejores plantas aromáticas: unos seis kilos de la mejor mirra, unos tres kilos de canela y unos tres kilos de caña aromática;

24 unos seis kilos de casia, pesados según el peso oficial del santuario, y tres litros y medio de aceite de oliva.

25 Haz con todo esto el aceite santo de consagrar, de la misma manera que un perfumero prepara sus perfumes. Éste será el aceite santo de consagrar,

26 y deberás derramarlo sobre la tienda del encuentro, el arca de la alianza,

27 la mesa con todos sus utensilios, el candelabro con sus utensilios, el altar del incienso,

28 el altar de los holocaustos con todos sus utensilios, y la palangana con su base.

29 Así los consagrarás y serán cosas santísimas; cualquier cosa que las toque, quedará consagrada.

30 »Derrama también de ese aceite sobre Aarón y sus hijos, para consagrarlos como mis sacerdotes,

31 y di a los israelitas lo siguiente: “A través de los siglos, éste será mi aceite santo de consagrar.

32 No lo derramen sobre cualquier hombre común, ni preparen otro aceite igual a éste. Es un aceite santo, y como cosa santa deben tratarlo.

33 Si alguien prepara un aceite igual a éste, o lo derrama sobre cualquier extraño, será eliminado de entre su gente.”»

El incienso

34 El Señor le dijo a Moisés:

«Toma una misma cantidad de las siguientes especias: resina, uña aromática, incienso puro y gálbano aromático,

35 y prepara con ellas un incienso puro y santo, mezclándolo todo bien, como un perfumero al hacer sus perfumes.

36 Muele muy fina una parte, y ponla ante el arca de la alianza, en la tienda del encuentro, o sea donde yo me encontraré contigo. Este incienso será de lo más sagrado para ustedes,

37 y no deben preparar para su propio uso otro incienso igual a éste que has preparado. Es del Señor, y para ti será una cosa sagrada.

38 El que prepare un incienso igual para disfrutar de su aroma, será eliminado de entre su gente.»

Éxodo 31

Los artesanos para el santuario

1 El Señor se dirigió a Moisés y le dijo:

2 «Mira, de la tribu de Judá he escogido a Besalel, hijo de Urí y nieto de Hur,

3 y lo he llenado del espíritu de Dios, y de sabiduría, entendimiento, conocimientos y capacidad creativa,

4 para hacer diseños y trabajos en oro, plata y bronce,

5 para tallar y montar piedras preciosas, para tallar madera y para hacer cualquier trabajo artístico.

6 Le he puesto como ayudante a Oholiab, hijo de Ahisamac, que es de la tribu de Dan. Y a todos los sabios les he dado más sabiduría, a fin de que hagan todo lo que te he ordenado:

7 la tienda del encuentro, el arca de la alianza, la tapa que va sobre el arca, todos los utensilios de la tienda,

8 la mesa con sus utensilios, el candelabro de oro puro con sus utensilios, el altar del incienso,

9 el altar de los holocaustos con sus utensilios, la palangana con su base,

10 la ropa tejida, es decir, la ropa especial del sacerdote Aarón y la ropa de sus hijos para cuando oficien como sacerdotes,

11 el aceite de consagrar y el incienso aromático para el santuario. Ellos deben hacerlo todo tal como te lo he ordenado.»

El sábado

12 El Señor se dirigió a Moisés y le dijo:

13 «Habla tú mismo con los israelitas y diles lo siguiente: “Deben respetar mis sábados, porque ésa es la señal entre ustedes y yo a través de los siglos, para que se sepa que yo, el Señor, los he escogido a ustedes.

14 El sábado será sagrado para ustedes, y deberán respetarlo. El que no respete ese día, será condenado a muerte. Además, la persona que trabaje en ese día será eliminada de entre su gente.

15 Se podrá trabajar durante seis días, pero el día séptimo será día de reposo consagrado al Señor. Cualquiera que trabaje en el sábado, será condenado a muerte.”

16 Así que los israelitas han de respetar la práctica de reposar en el sábado como una alianza eterna a través de los siglos.

17 Será una señal permanente entre los israelitas y yo.»

Porque el Señor hizo el cielo y la tierra en seis días, y el día séptimo dejó de trabajar y descansó.

El becerro de oro

18 Cuando el Señor dejó de hablar con Moisés en el monte Sinaí, le entregó dos tablas de piedra con la ley escrita por el dedo mismo de Dios.